jueves, 28 de abril de 2022

Capitulo 21K Asics Golden Run 2022

 


Y llego el dia, la media maratón del Asics, carrera que le tengo especial afecto, Quizás porque en 2018 había hecho una de mis mejores marcas o por la remera que aquella vez estuvo buenísima y que aun hoy sigo utilizando. 


La distancia me llama, 21 k es la distancia que mas disfrutaba antes de la pandemia.  La carrera de marzo de New Balance la había terminado con lo justo. pero me estoy adelantando. vamos desde el comienzo, hace un mes atrás cuando me anoté. 


Digo que arranco desde que me anoté porque la predisposición, tu cabeza se alinea a ese objetivo.  y eso no ocurría cuando no había carreras. Era sólo salir a correr sin saber para qué mejorar o para qué se entrena. Era entrenar por entrenar, para despejar la mente básicamente pero ya con un objetivo concreto y con ganas de mejorar lo que había hecho en la carrera anterior, la cosa es distinta. 



Te comprometes mas en los entrenamientos, sabés que hay un mínimo de entrenos que tenés que hacer para llegar mas o menos bien a la carrera. Salir tres veces por semana como mínimo, metiendo sábados y domingos y alguna que otra salida en la semana. Aprovechar al máximo los feriados y como se venía Semana Santa, mi objetivo era poder meter 4 dias de 4, entrenamientos. Y a la vista de cómo salió la cosa, mal no estuvo. Porque en esos dias pude salir y hacer 60 kilómetros en 4 dias, con un promedio de 15 kilómetros por salida. Jueves 10 kilómetros, 21 kilómetros el viernes, 16k kilómetros el sábado, con cuestas incluidas, y el domingo de gloria 13k kilómetros. Increíblemente el del domingo fue cuando mas suelto me sentí a pesar del cansancio de los dias anteriores. y eso me dejó buenas sensaciones. 

  

Para mis adentros, me decía; en la semana en caso de poder, salgo y meto unos kilómetros para tener el cuerpo caliente y que no se enfríe. La verdad, tuve una semanita complicada en el trabajo y no pude meter ningún entreno, eso me dejó medio preocupado. Porque después de meter varios entrenos seguidos, las piernas quedan cargadas y necesitar meter algo de elongación para estirar y distender esos músculos que quedan comprimidos después de esa mini pretemporada. Pero quedaba el sábado y mi idea era salir en bici y meter una activación andando, para mover los músculos. 


Asi que fui a buscar el kit a la mañana temprano porque sabía que si iba muy sobre la hora de cierre, iba a haber mucha gente. Fui con mi bici que había arreglado la semana pasada asi que además tenía que probarla. 

Fui y el trámite fue rápido, muy buen kit, con galletitas agua y gel, bastante completo. La remera me quedaba medio apretada, pero hay que seguir mejorando y ponerse bien en lo físico. Con el tiempo lo vamos a ir logrando. Para qué voy a mentir, todo de blanco parecía una heladera o si se quiere un KOH-I-NOOR, un corcho vestido de blanco. I sí el color no favorece para los que somos regordetes. resabios de la pandemia, gordo que corre... 





Probé la bici y dónde iba a ir? A los bosques de Palermo, lugar donde inicié todo, mis salidas en bici, primero al lago 3 de Febrero después al campo de Golf y después al otro lago del Rosedal. Pero como había mucha gente, directamente me fui para el lado de Aeroparque. Palermo, zona que no iba desde antes del a pandemia mínimo 2 años que no pasaba por allí por el tema de pandemia. Necesitaba ver cómo estaba. también era para ver por donde pasaba la carrera si bien conocía, queria reconocer el terreno. 

  

La zona de Aeroparque esta preciosa, la cambiaron para bien. Me saqué una fotos el club de pesadores, que el contraste con el rio es una panorámica espléndida con el sol pegando de lleno para una mañana de sábado espectacular. 




Una mañana que estaba fresca, cuando vi que hacían 7 grados pensé en ir en colectivo. Menos mal fui en bici porque al rato ya con el sol pegando de lleno hizo subir la temperatura. Fue allí donde decidí usar las manguitas para el dia de la carrera. Supuse, que iba a hacer frío al comienzo y que luego el sol levantaba la temperatura. y se dio así. Porque no sabía si llevar remera térmica, el dia anterior ya lo tenia definido y estos detalles suman para la confianza. Como que vas visualizando la carrera el dia anterior. Y visualizar momentos, escenarios que pueden o no darse en la carrera es estar preparado para lo que pueda llagar a pasar. 


Amanecía el domingo 24 de abril, eran la 5:30 una mañana fresca, un desayudo de campeones, cereales, yogurt, y todavía de noche, Salgo de casa a las 6 Am, voy en colectivo porque llegó antes que un taxi. La largada era en Dorrego y Alcorta, como tantas otras veces largaron muchas carreras de allí. Hacia mucho no hacia una carrera por Capital Federal, por esos lados, La pandemia nos destrozó. Por eso hay que volver a esos viejos lugares de antes. se veía nuevamente el contraste entre los volvían destrozados de los boliches y los que van a la carrera. 


 Mientras el dia iba aclarando fui haciendo mi entradita en calor, tuve algo de dudas pero era porque los músculos estaban fríos todavía. Había mucha gente y mucha gente por llegar aun, me sorprendió la cantidad, por eso salí con mi cuellito de tapabocas. Todavía me sigo cuidando y hay que seguir cuidándose. 

Lo bueno era que estaba todo muy bien organizado, entrega de chips, guardarropas, baños y el escenario, bien distribuidos. Todo fundamental para la previa y el post. Fue toda una gran fiesta que hasta pusieron banda en vivo que levantó a la gente, Jornada armada para disfrutar en familia. Porque para los que acompañaban también había cosas para hacer y no aburrirse. Clima familiar distendido y con muchas ganas de correr. 




Como dije, había mucha gente y decidí quedarme con el tapabocas y fui arrimándome tímidamente a la manga de largada. Sobre un costado bastante atrás, ya no me vuelve loco esta adelante de todo. Antes quizás si, ahora que sé que al único que el tengo que ganar es a mí mismo, no me vuelve loco. Comprender eso te lleva algunas carreras. Es ganar en calma, tranquilidad y confianza de lo que uno hace. 


Era mi primera carrera sin auriculares, no por decisión propia sino porque se me rompieron. Mis dudas eran si tendría cosas en las que distraer el cerebro. ¿En qué pensar en una carrera larga? Sumar números, restar, lo hago mucho las patentes de los autos. Los primeros 5 kilómetros fueron de estar atento a lo que pasaba, mucho agolpado de gente, muy rápido no se pudo ir. Alli pude pasar bastante gente, muchos de los cuales hacían la carrera de 10k. Que mal me ponen los que apenas larga la carrera van charlando de la vida sin esforzarse, poniendo una barrera a lso que van atrás, por qué no salieron mas atrás para hacer eso? Me preguntaba. Ya cuando los caminos se dividieron se podía correr mas cómodo. Entradita en calor, cuerpo ya caliente, en plenitud y la verdad ir concentrado todo el tiempo a lo que pasaba. A veces yendo por la vereda por la congestión de gente. Me daba  agilidad, analizaba huequitos para meterme, avanzar y frenar avanzar y frenar, la ansiedad era grande. 



Para esta carrera me propuse estar un poquito mejor que la carrera anterior. Pero eran los primeros kilómetros y faltaba mucho todavía.  Agarramos la recta larga por Alcorta hasta la cancha e los innombrables, y luego Libertador hasta la General Paz y volver por colectora de la Cantilo, donde se encontraba para mí el primer puesto de hidratación, Gatorade, agua. para renovar energías. Y tal como había panificado, cambiar el chicle, porque yo sin chicle no te corro. 


Recién iba la mitad de carrera faltaba la otra mitad y para los que corremos media maratón, sabemos que la carrera en serio empieza en el kilómetro 10 u 11 y que allí evalúas cómo estas. Ahí es donde el cansancio empieza a sentirse y ya las energías no son las mismas que al comienzo. 



Y te volvés experto en números. en el kilómetro 7 descubrí que 21 kilómetros son 3 veces 7 kilómetros., Chocolate por la noticia, no? o sea que podía dividir la carrera en 3 etapas, 7 kilómetros la comienzo, 7 kilómetros de velocidad crucero y 7 para quemar las naves.  


 Ya volviendo por Alcorta por esa misma recta por donde fuimos, ahora volvíamos, unos 3 o 4 kilómetro pasando por el lago 3 de febrero frente a la confitería del Golf. Por donde pase el dia anterior en bici. Ponele que lo del dia anterior fue un reconocimiento de la cancha, los lugares los conocíamos bien. Ya eran los últimos kilómetros y ya se escuchaba, a lo lejos, la música que venía del escenario principal de la carrera. En la vuelta a la altura de la calle Libertador, uno de los que ayudaban, daba unas indicaciones, no pisar lo adoquines, consejo que venía bien porque con el cansancio del trajín de la carrera casi vas arrastrándote, lo puede significar una caída y nosotros conocemos de caídas. Otro consejo fue: ayúdense entre ustedes dos, como para ir motivándonos, cuando lo vi caminar le decía que solo quedaban 2 kilómetros, una entradita en calor. Lo que sí, desconozco si le sirvió o no, pero por mas que mi ritmo era mas lento con los pasos, ese aliento que le daba al otro me daba fuerzas a mi también. Los últimos kilómetros es todo mental, es abstraerse de lo que pasa a tu alrededor, de los que ya terminaron y van volviendo, de todo. 



Es tu carrera es tu final es tu objetivo y lo estas por concretar. Asi que tenes que pasar arriba a todo lo que este a tu paso. Levantá la cabeza, levanta las rodillas y corre, como si la carrera recién estuviera empezando. Flotá, volá hasta la meta porque el objetivo esta logrado. Fue tu carrera, de esas que no se te daban hace mucho tiempo. 


Terminaste con aire y con ganas de mas kilómetros, eso te eleva la autoestima, la confianza. Confianza que te destrozaron, que de a poco fuimos recuperando y a media que uno se fue encontrando su lugar, sentirme respetado, sentirme útil nuevamente, algo que me despojaron y hubo que reconstruirse. Otra vez sos parte importante de un equipo sos referente, tenes responsabilidades, creciste aprendiste, sos referente, te tienen en cuenta vamos por mas. Te ganaste el lugar, con trabajo duro y esmero, otra vez, en contra de todos o pronósticos, estamos. Y un dia la herida, después de mucho tiempo sanó. 




Volviendo a lo que fue el final de la carrera, no te guardaste nada sabes que dejaste todo. Eso es lo que me llevo, diste todo y no hay reproches. Seguro hay cosas para mejorar. pero esa sensación de satisfacción personal no te la saca nadie. Se ve que no haber salido en la semana me permitió correr descansado de las piernas, no es lo recomendable pero esta vez salió bien.  


A raíz que no tenia auriculares esta vez mire mas el reloj, para ver cuántos kilómetros iba si estaba bien medido el circuito, y la verdad funcionó. El reloj funciona de maravilla tal vez, en otras carreras podríamos utilizarlos para ver el ritmo y mantenerlo, pero eso será otra historia, que veremos mas adelante. Que las cosas sigan fluyendo como hasta ahora que tan mal no estamos. Puede, esta vez sin auriculares, aniquilar fantasmas y resolver cuestiones internas. 



Terminé y fue una fiesta, que me olvidé de apagar el Garmin una vez terminada la carrera, recién lo apago luego de retirar las cosas del guardarropa. La fiesta no solo estaba en el escenario, sino que abajo también. Vi mucha gente feliz a mi alrededor, tomando mate, desayunando acompañando, El dia acompañaba, con un sol radiante. qué mas se puede pedir? De estos dias son para guardar y enmarcar. Parecía un recital y en parte lo fue, la banda le dio mucho color al domingo, excelentemente organizado estuvo todo. Una jornada que me hizo rememorar a las grandes fiestas que eran las carreras pre-pandemia, un poquito de volver a lo que era antes la vida. 


Es lindo volves a correr por la Capital Federal., otra vez la calle vuelve a ser de los que corren, al menos por un rato. 


Me fui con las piernas llena de kilómetros y una felicidad inmensa que llenan el alma.