lunes, 28 de marzo de 2016

Moraleja ll



Un vendedor, un empleado administrativo y el gerente caminan al almuerzo cuando encuentran una antigua lámpara de aceite.
La frotan y un Genio aparece envuelto en una nube de humo.
- Como generalmente otorgo tres deseos, les voy a dar uno a cada uno - dice el Genio.
- ¡A mi primero! ¡Yo primero! -porfía el empleado administrativo.
- Quiero estar de vacaciones en el Caribe - Y acto seguido desaparece.
Sin salir de su asombro, el vendedor grita:
-Ahora a mi! ... Quiero estar en Hawai, descansando en la playa con mi masajista personal, con una inagotable provisión de cerveza y con una top model- Y también  desaparece.

- Bueno, ahora te toca a ti -le dice el Genio al gerente.
- Quiero que esos dos vuelvan a trabajar después del almuerzo -dice el gerente.

Moraleja: Siempre hay que dejar que el jefe hable el primero

No hay comentarios:

Publicar un comentario