jueves, 26 de octubre de 2017

La experiancia de correr



Correr es una experiencia que no solo queda cuando termina una carrera, no señores, no queda cuando te dan la medalla. Solo es inicio, porque ya estas pensado en la próxima carrera cuando cruzas la meta.

Y tu ego queda tan arriba, sensación de estar cansado vacío de haber dejado todo para conseguirlo, pero que a la vez ese mismo vacío es el que te llena. Te llena el cansancio mismo, la satisfacción de haber logrado lo que fuiste a buscar. Quedas feliz, esa felicidad de plenitud, sentís que por fin todo en la vida se equilibra a tu favor, sentís que si lograste eso podes con todo. Por eso sentís la necesidad de comunicarlo, contar la experiencia vivida. Porque vas corriendo y te pasan cosas, sensaciones que al momento de escribir querés retratarlas, a veces las palabras salen y a veces son cosas bastante difíciles de explicar con palabra.

Vas corriendo, tenés esas luchas y conversaciones mentales que te van pasando en la  carrera, sea una carrera largo o una distancia larga. En las distancias mas largas es cuando se te pasa la vida entera por tu cabeza, repasas todo y se te vienen millones de imágenes de tu pasado,  presente y también futuro. Hasta llegas a ilusionarte como que te anticiparas y visualizas a  donde queres estar en la vida. Es verte vos mismo como vos queres, donde deberías estar y hasta los pasos seguir para llegar a esa visualización. Una especie de estrategia  para lograrlo. Me choca igual decir estrategia, suena como muy armado y planificado. Prefiero decir que es ir acomodando las piezas en la medida que se presenten.

Pobres de los que te escuchan o te leen,  una y otra vez la misma historia. Para un neutral, o sea persona que no entienden esto de correr debe ser insufrible.
Y cuando lo contás, no lo contás como si fuese una épica, aunque para vos internamente lo sea. Lo contás con humildad de algo que supiste manejar para lograrlo, te entrenaste, te cuidaste, dejaste cosas de lado. Hablas que de que las cosas te salieron de suerte, sabiendo perfectamente  que no fue azar. Pero por pudor o para no pecar de soberbia para quien escucha preferís  ser mas bien modesto y que no te odien.

También sabes que con esto de correr te conectaste con el mundo, al menos tenes tema de conversación de algo que te gusta. Igual pensado mejor y reflexionado con esto ultimo, hay tantos temas de conversación, muchas veces nos negábamos a que no queríamos hablar y nos cerrábamos. Me acuerdo mucho esa época en la que te guardabas todo, sencillamente no teníamos ganas de hablar querías pasar desapercibido, ojo a veces tengo raptos de aquel que fui. Pero por suerte, con el tiempo entendiste que hay momentos para hablar y momento para estar en silencio. Sabes que por momentos vas a estar bien y otros  mal, y  que obviamente los buenos momentos son para hablar mas y los otros para callar y retomar el camino.

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